Cuando yo era pequeño (bueno, aún más pequeño que ahora) hacíamos 12h de fútbol y de baloncesto y estaba bastante bien, solo que el pabellón se quedaba desierto. Hubiera tenido que haber un poco mas de apollo de los padres tal vez. En esta ocasión no sé como habrá sido, pero siempre es una buena iniciativa.